
La ruta empezó en Bogotá y fué subiendo por la costa oeste hasta el norte del país, de ahí fuí bajando por la parte este hasta regresar de nuevo a Bogotá. me quedé con las ganas de conocer toda la zona de la selva amazónica, puede que quede para otra ocasión, sur de Colombia y norte de Perú.
Desde siempre tenía la creencia que Colombia era un país muy violento y poco atractivo, hasta que hace casi un año estuve viajando por gran parte de América Latina, y gracias a los colombianos que encontré y a la gente que había viajado por allí, mi percepción fue cambiando y me fui interesando cada vez más por este país.
Colombia tubo un período muy violento, causado por varios motivos, la llegada del café hizo que los campesinos se sintieran explotados, tenían ínfimos sueldos y solo se enriquecen intermediarios, la mayoría de los cuales de países desarrollados.
En Colombia hay mucho cultivo minifundista, pequeñas extensiones cultivables en terrazas,
Surgen mafias que se quieren apoderar del control de la producción de café. Los campesinos para combatir a estas crean sus guerrillas, protegen sus propiedades y están muy quemados con la situación y con el gobierno. Todo esto empieza a finales de los años 30, y la violencia se descontrola con asesinatos sangrientos en cualquier lugar y a cualquier hora. Se dice que mueren más de 180.000 personas. El auge de la coca, no ayuda a la situación, aparecen más mafias, más paramilitares (delincuentes armados y violentos de ideología de derechas) y los campesinos se ven más amenazados y acorralados, muchos se esconden en las montañas.
Los paramilitares llegan a los poblados con acceso a las montañas y controlan el paso de las personas a los cultivos. Aburridos, sin estudios, en un ambiente hostil, crean el terror en los poblados imponiendo su ley y explotando a los campesinos. Imaginaos en un pueblo de 500 habitantes donde llegan un grupo violento y armado de 30 personas, creando el terror en el pueblo. En Nabusimake conocí una mujer a la que le habían matado a su hermano a plena luz, en plena calle. Nadie se atrevía a denunciarlos. Si te acusaban de ser guerrillero, a la semana aparecías muerto en algún lugar, fuera o no fuera cierto.
En el caso concreto de Nabusimake, duró hasta que un día los paramilitares mataron al profesor del pueblo, resulta que su hermana era Juez en Bogotá, y fue encarcelando a cada uno hasta expulsarlos del pueblo.
Durante muchos años sucedieron todas estas barbaridades hasta que el gobierno mandó al ejército a controlar todas estas zonas. Se dice que los paramilitares aparecieron a partir de una propuesta del actual presidente, Uribe, debido a que sus padres fueron asesinados por guerrilleros. Más adelante el gobierno del señor Uribe regaló motos y un sueldo a los paramilitares para que abandonaran las montañas, muchos de estos se les puede ver haciendo de moto taxi.
Otro aspecto que hacía que Colombia fuera un país poco recomendable, es porque durante varios años, Pablo Escobar, uno de los narcotraficantes más importantes del mundo, daba 2 millones de pesos (666€) a todo aquel que matara a un policía. Esto provocó que nadie quisiera ser policía y los que lo eran caían como moscas o eran corruptos. Esto conlleva un aumento de delincuencia en todo el país.
El gobierno colombiano da una recompensa de ½ millón de dólares para quien mate a Escobar. Escobar, considerado demonio por muchos y ángel por muchos otros, puesto que da de comer a poblaciones enteras, escapa en numerosas ocasiones de acabar muerto, comprando a policías, escondiéndose en poblados, escapándose en el último momento. Al final cayó muerto en un tejado de una casa a punto de subirse a un helicóptero, casi lo había conseguido de nuevo.
Las noticias que llegan a Europa durante muchos años es de muertes, venganzas, desaparecidos, violencia gratuita,… esa es la percepción que aún hay en mucha gente. Actualmente la cosa está bastante tranquila, y no hay tanta violencia gratuita, hay países que están mucho peor en estos momentos (Venezuela, Haití,…)
Me comentaron también que otro narco muy famoso, cuyo nombre nunca supe, fue capturado y encarcelado por los EEUU. Este se ofreció a pagar toda la deuda externa de Colombia a cambio de que lo trasladaran a una prisión colombiana, supongo que para vivir como un rey y seguir dirigiendo el cotarro desde ahí.
La llegada a Bogotá fue extraña, como cuando llegas por primera vez a una ciudad desconocida, no sabes si los barrios son seguros, los transportes, los horarios, la gente. Esta sensación me pasó en casi todas las capitales de Centroamérica, como todas las grandes ciudades tienen sus peligros, es básico informarse bien de los sitios a los que vas.
Después de 3 días por Bogotá, ya no sabía que más visitar, seguro que nos perdimos cantidad de cosas curiosas, supongo que si viveras en ella o si te llevan de la manita tomas una perspectiva mucho más atractiva. Pero a parte de sus museos y pasear por sus barrios y parques, en tres días tuvimos suficiente, personalmente me apetecía mucho dejar la capital y adentrarme en zonas más rurales, con paisajes y gente más cercana en ambientes menos hostiles.
En Bogotá no os podéis perder el barrio de la Candelaria, el mirador de Montserrate, la colección Botero (con obras de Dalí, Ernst, Picasso, Miró, Barceló, tàpies, boteros,…).
A destacar la exposición de Andy Warhol y un concierto en el parque Simón Bolívar (el militar que expulsó a los españoles, hay referencias del mismo por todo Colombia) de Gilberto Santa Rosa, un mega crack de Puerto Rico de la Salsa más pura.
De ahí fuimos a Salento, pueblecito cafetero muy mono, donde se come trucha, de distintas formas, con patacón (plátano aplastado frito) en todos los sitios. De ahí un jeep al parque de Cócora , una excursión circular de 6 horas por un bosque lluvioso o selva, donde hay palmeras de 60 metros y en una cabaña hay muchísimos colibríes, les ponen agua con azúcar y vainilla, les encanta!.
Las distancias, como en casi toda América, son enormes, por tierra hay que moverse en bus, en muchos sitios no hay línea férrea para pasajeros, para mercancías todavía. Así que planeábamos los viajes por la noche para ahorrarnos dinero en alojamientos y tiempo.
Siguiente parada: Medellín, segunda ciudad en importancia en Colombia, esta si me pareció una ciudad mucho más segura y con muchas cosas por conocer, simplemente pasear era mucho más agradable y sorprendente que en B

Plato típico, la bandeja Paisa, con arroz, frijoles, chorizo, aguacate, plátano frito, panceta requemada, huevo, arepa y vaso de leche… bufff!!!!
Siguiente parada: Cartagena, ciudad amurallada muy turística, con casas coloniales pintadas en tonos pastel con balcones llenos de flores y tiendas caras. Esta es la Cartagena turística, no llegamos a ver la Cartagena olvidada, pero me la puedo imaginar… A destacar el calor casi insoportable, goteando todo el día. Se visita enseguida. La verdad es que fuimos bastante a saco hasta que llegamos a la zona de Santa Marta.
Antes de salir de Sant Cugat me había enterado de un proyecto que se estaba gestando a partir de una iniciativa de Ramon Pros, el director del Ateneu de Sant Cugat. Este había conseguido que, con capital Español y Colombiano, se iniciara una red de Ateneos (Centros Sociales-Culturales donde hay ordenadores, biblioteca, salas de exposición, salas para hacer clases y talleres fomentando la iniciativa ciudadana, con precios asequibles). Ya estaban en marcha 3 centros. El que estaba más avanzado era el de Ateneo Santa Marta, a punto de ser inaugurado. El segundo, el Ateneo Macondo (en Aracataca) y por último el Ateneo de Atanquez en la Sierra Nevada. Estuve colaborando en la inauguración del Ateneo Santa Marta. Tanto el equipo como los vecinos de Santa Marta que sabían del proyecto y los que venían a informarse estaban muy ilusionados. No existía nada parecido en la ciudad, y la inauguración fue un éxito con gran afluencia de gente de todas las condiciones sociales y culturales. Hubo presentación institucional, música, baile, recital de poesía, y de violín, un grupo de sordomudos que bailaban al son que les marcaba el corazón, grupo infantil de danza bailando el baile típico de la zona, el Chicote, teatro, piscolabis,… un éxito!!
También estuve visitado el Ateneo Macondo en Aracataca, donde nació Gabriel García Márquez. En este se iba a realizar en un bonito antiguo hospital abandonado. Hay mucho por hacer todavía, pero ya está en marcha.
http://ateneosantamarta.blogspot.com/
Se dice que en Santa Marta y alrededores fue donde desembarcaron los primeros colonos en Colombia hacia 1525, y de ahí

Ubicada entre la Sierra Nevada de Santa Marta, con las montañas más altas del país con 5700m de altura, y el mar Caribe. En esta ciudad se encuentra la primera iglesia de Sur América, la catedral de Santa Marta. En los alrededores de la ciudad, habitaron los indígenas Tayrona.
La ciudad de Santa Marta es bonita y muy calurosa, viven unas 70.000 personas, cerca de esta, a 15 minutos en bus, había una bahía de pescadores más tranquila y auténtica, que me permitía ir de vez en cuando al Ateneo y a la vez moverme a las distintas zonas que me interesaba visitar.
El pueblo se llama, Taganga y solía ser un punto logístico, porque desde ahí se podían visitar gran número de parajes, playas, parques, zonas cafeteras, montañas de casi 6000 metros y zonas indígenas. Las distancias no eran cortas, pero era lo más cercano a casi todo. Por ahí visité el Parque de Tayrona. Es un parque natural en la costa, está protegido y tiene playas fantásticas, también hay unas ruinas de un antiguo poblado indígena, se llama Pueblito.

Minca era un pueblito cafetero muy lindo y un poco apartado con un río muy agradable. Zona lluviosa por las tardes y clima mucho más fresco y húmedo que en la costa.
Una vez en esta zona me empecé a interesar por los indígenas. No se hablaba mucho de ellos pero de vez en cuando me encontraba con personajes curiosos, con trajes típicos indígenas, la mayoría desorientados y poco cómodos en la ciudad. Personitas con pelo negro lacio largo, de baja estatura y poco dados al diálogo.
Los indígenas en Colombia, no es como en Méjico, Perú o Bolivia que se explota mucho más la su cultura (leyendas, ruinas, rituales, costumbres…) creando mucha expectación en los turistas. En Colombia, podías pasearte y no darte cuenta que existían estas civilizaciones milenarias viviendo en lugares remotos de difícil acceso.
Los indígenas precolombinos que habitaban toda la zona de la Sierra Nevada de Santa Marta, eso incluye desierto, costa, y montañas, era una única etnia llamada Tayrona durante cientos de años. Con la llegada de los españoles en 1525, llegaron luchas y enfermedades desconocidas que aniquilaban poblados enteros a medida que iban conquistando terreno. Los indígenas se refugiaron en las montañas de Santa Marta, en poblaciones como La Ciudad Perdida (viene a ser el machu pichu colombiano), allí decidieron, que no podían luchar contra gente armada y sus enfermedades y que antes que les descubrieran y aniquilaran, debían separarse en distintas zonas para intentar que la especie sobreviviera. Se dividieron en distintas zonas y de ahí derivaron las etnias posteriores. Los Wayúus en el desierto, los Koguis en la media montaña, Los Arhuacos en las zonas más elevadas, y hay más, yo conocí estas tres. La mayoría son bastante bajitos, los Koguis adultos hombre deben hacer una media de m y medio. En general muy reservados y poco habladores, vestidos con telas como de saco blancas, cada étnia con sus complementos respectivos, collares, mochilas (sarró), gorros, zapatos, cinturones…
Los indígenas Tayrona, hacían elementos de oro para ornamentar sus rituales. Hacían figuras de animales que representaban distintos aspectos de su cultura:
La rana es símbolo de la fertilidad, la serpiente de lo maligno, el murciélago de la noche, el jaguar de la fuerza,… Eso era lo que perseguían los españoles. Pero nunca llegaron a descubrir la Ciudad Perdida, pero siglos después unos saqueadores sí llegaron, y sabían que los indígenas al morir se les enterraban con todas sus posesiones dentro de sus casas en un sarcófago de piedra. Así que estos pandilleros llegaron a la Ciudad Perdida abandonada, y con varillas de hierro iban golpeando el suelo hasta oír hueco, ahí estabas tumbas con sus tesoros.
El Banco de la República de Colombia, se dedicó a comprar los tesoros indígenas, para evitar que estén en manos particulares o en poder de otros países, se extrañó que de repente cada cierto tiempo el mismo grupo de personas les llevaran auténticos tesoros. Empezó a investigar y tras encontrar a uno de ellos borracho, le sonsacaron el secreto. No fue hasta el año 1976 que no se descubrió la Ciudad Perdida. El ejército controló su acceso y empezaron trabajos de arqueología, actualmente está terminantemente prohibido excavar en estos lugares.
El primer encuentro con los indígenas fue en la Guajira, en el norte del país, tocando a Venezuela. Un viaje de 8 horas, 3 de las cuales en camioneta por el desierto. Una especie de pick up 4x4 grande, donde viajábamos compartiendo espacio con provisiones, animales vivos y gran cantidad de gente que iban a la Guajira, pensad que son los únicos transportes hacia los poblados.
A la ida, en una de estas, en medio del desierto, se me cayó la riñonera, con el ipod, el teléfono, el DNI, algo de dinero y una navaja. Cuando me di cuenta que se me había perdido, llevábamos más de una hora de trayecto. Por supuesto que el 4x4 no iban a dar la vuelta con 15 pasajeros, 2 cabras, el conductor y dos ayudantes. Tampoco era una buena idea ir a buscarlo andando con la mochila entre una infinidad de caminos y encontrar la manera de volver. Aún así tenía la corazonada que esto no iba a acabar ahí…
El transporte iba lleno de indígenas Wayúu, más o menos occidentalizados, con más o menos rasgos indígenas. Observé que algunos se saludaban entre ellos al subir, dándose la mano o con un leve gesto con la cabeza casi sin apartar la mirada del suelo, me daba la impresión como si fueran conocidos o familia. Aún así casi no se dirigían la palabra en 3 horas en un espacio en el que casi no nos podíamos ni mover.



Indígenas Wayúus
Iba acompañado desde Taganga de unos hermanos alemanes (Sven y Natalie). Al llegar al pueblo del Cabo de la Vela, una carretera de arena a ambos lados de la cual vivía la gente en cabañas de cañas, bambú y techos de hojas de banano. Junto a estas la playa del Cabo de la Vela, zona eminentemente pesquera.

A las 11 de la noche se fue a pescar con su compañero y volvieron a las 8 de la mañana con sus trofeos, habían dormido en la barca. Esa mañana nos llevaron de paseo en barca a unas playas donde el desierto termina en el mar y a visitar el Pilón de Azúcar.
En una de esas playas me contó que había estado 1 año y medio en la cárcel, lo habían pillado con un camión con 500kg de cocaína.
Cocaína, que no coca, las hojas de coca no es droga, es todo el proceso químico posterior lo que la convierte en droga, ojo!
Como sabéis se está haciendo una fuerte campaña por parte de países productores como Bolivia, Perú, Colombia, Ecuador para defender la hoja de coca, como elemento cultural, ritual, tradicional, energético y medicinal. Su propuesta es regularizar y controlar su producción.
El hábito de usar las hojas de coca, como analgésico se remonta al siglo II a. C. y continúa siendo común entre los actuales grupos indígenas de las serranías y altas mesetas. Si bien la coca fue considerada un artículo de lujo en tiempo de los incas y utilizada durante los ritos sacerdotales únicamente por los emperadores incas y nobles, su consumo fue estimulado por los conquistadores españoles para extender las horas de trabajo de la mano de obra originaria y desde entonces su uso se encuentra ampliamente difundido entre la población indígena de los Andes. Para lograr los efectos deseados, es necesario agregar un componente alcalino a la mezcla, usualmente cal viva o ceniza alcalina (básicamente bicarbonato de calcio de origen vegetal o conchas marinas). Su uso trasciende el mero hecho de mitigar las sensaciones de hambre, sed o cansancio,
En Colombia solo tienen permiso de cultivo de coca los indígenas.
El pescador, me contó que en alguna ocasión había hecho de marinero en una lancha rápida que transportaba 2000kg de cocaína procedente de las montañas a República Dominicana o Jamaica, de allí la transportaban a Estados Unidos, Europa, África. Y supongo que debían venir de las montañas de Santa Marta. Me comentaba que pronto iba a hacer otro desembarco. Yo lo flipo…
El barco llevaba 1 capitán y 2 marineros y el sueldo de uno de los marineros por trayecto era de 7.000.000 de pesos (2300€)
Si contamos que el gramo de cocaína en Colombia, cuesta 10.000 pesos (3,33€/gramo), el kg cuesta 10.000.000 pesos (3333€/kg) Suponemos que será 100% pura.
10.000.000 pesos/kg x 2000kg=20.000.000.000 pesos (6,6 millones de €)
Si contamos que el gr de cocaína en España se vende a una media de 55€/gramo, el kg cuesta 55000€/kg (en el caso que no sea 100% pura, que es lo más probable, esta cifra se podría llegar a doblar)
55000€/kgx2000kg=110.000.000 €=110 millones de euros!!! (Podrían ser 220?)
El marinero que pone la barca a 250km/h, que se juega la vida y que si le volvían a pillar iba a estar de 7 a 10 años en la cárcel cobra 2300€.
De esta diferencia quien se enriquece? Quien es el explotado?
Se contentaba en decir que por lo menos así su familia comería durante todo este tiempo.
Los Wayúus eran personas orgullosas y modestas, como otras étnias indígenas, tienen sus propias leyes, allí no hay policía, y son muy vengativos hasta tal punto que puede haber venganzas de sangre que se cometen de generación en generación. En el caso de El Cabo de la Vela, me decía que el pueblo estaba dividido en 2 fronteras imaginarias, y que gran parte de la población no podía pasar andando a la otra mitad por problemas con entre los habitantes. La gran mayoría vivía con lo mínimo, poca agua corriente (cuando llegaba el camión cisterna), luz con generador, comida a base de pescado y ovejas, cabras (están en medio del desierto y las verduras y frutas escasean). Pero nadie hacía más de lo necesario para comer ese día, se pasaban casi todo el día a la sombra viviendo al día y dándole poco al coco. Tampoco me extraña, con ese calor!!!
Me contaba que muchos jóvenes de la zona estaban en la cárcel por tráfico, delitos de ajustes de cuentas,…
A su compañero lo habían cogido con armas ilegales en su casa, armas que solo puede llevar el ejército y la policía. Este se escondía en su casa, a unos 150 metros de su propia casa, un día desapareció, se había ido a porque había venido la policía al pueblo preguntando por él.
Yo creo también que el hecho de traficar era una manera fácil de conseguir dinero con graves consecuencias. Tienen el espíritu caribeño de hacer lo justo.
Un día andando medio zombi por El Cabo de la Vela, tenía fiebre a consecuencia de un golpe de calor, un hombre arrastrando un carro me preguntó si era español, y que cual era mi nombre. Me dice: creo que tengo algo tuyo. Ya está!! si es que lo sabía!!
Resulta que era el párroco de la iglesia evangélica. Me dijo que había encontrado a unos niños jugando en la calle con unos carnés que le pareció que eran importantes, mi DNI y el carné de estudiante (si que pasa!, hice un postgrado de febrero a junio de 2008, que todavía soy estudiante!!). Después de mucho presionar, conseguí que fuera a hablar con ellos para saber de donde los habían sacado. Me quiere cobrar recompensa para devolverme el DNI y el carné de estudiante, le digo que volver a hacerme el DNI no me supone ningún problema y que el teléfono y el ipod son muy importantes, que entiendo que ha sido mi falta perderlo y que no acuso a nadie de nada, pero que me gustaría recuperarlo. Que si es necesario puedo pagar una recompensa pero si me lo devuelven todo.
Como era de esperar tenía que estar muy encima para que las cosas sucedieran, el ritmo caribeño puede ser desesperante a veces, así que me pasé por su casa varias veces para presionarlo. Por su parte todo eran buenas palabras e intenciones, pero no me fiaba un pelo, un párroco pidiendo recompensa de las desgracias ajenas…
Al día siguiente me dice que la riñonera la había encontrado Edilson, el ayudante del chofer 4x4 del señor Quiche. Me comentó cosas sobre los objetos, que solo podía saber si los había visto,
- el teléfono no era solo teléfono?
- como?
- Era también cámara, no?
- …
-El Mp3, tienen una pantallita y va dentro de una funda?
- …
en cambio me decía que Edilson había encontrado la riñonera con el dinero, los carnés y la navaja, nada más. Yo empezaba a desesperarme, los colombianos que quieren algo de ti, son bastante mentirosos y a todo dicen que si que no hay problema, pero luego te meten en unos embolaos…
Total que viendo el panorama, decido que tengo que hablar directamente con él. Aún con fiebre me espero a que lleguen con el transporte, y le expongo la situación, le digo que sé que él lo encontró y que no me creía que no estuvieran el ipod y el teléfono. Después de hacer un monólogo de más de media hora, el indígena, negaba con la cabeza y únicamente decía que no había nada y que a él no podía acusarlo de nada. De verdad que no lo hacía, le estaba ofreciendo recompensa!!
Total que me fui con una mano delante y otra detrás. Por suerte el párroco me devolvió los carnés sin recompensa. Bueno ha sido la única pérdida “importante” en todos mis viajes. Al final es solo dinero, lo peor era que el resto del viaje iba a estar sin música. Personalmente creo que ya los había vendido.
El Cabo de la Vela, está en la frontera con Venezuela. Las relaciones de Colombia con este país actualmente están algo crispadas, Colombia ha permitido a EEUU establecer bases militares a cambio de dinero y eso Chávez no le ha sentado muy bien, dice que lo considera una amenaza a su país. Chávez ha cortado todo comercio entre Colombia y Venezuela. Ya no suministra gasolina a bajo coste a Colombia, en Venezuela puedes llenar el depósito del coche por 2 €, a mi me cuesta en Barcelona 70€. Y los Colombianos están que trinan. Aún así a través de la Guajira hay gran cantidad de contrabando de gasolina, whisky y otros productos. Volviendo de ahí, pararon el autobús y después de media hora de revisión del bus, la policía empezó a bajar cajas de whiskey que iban escondidas en un falso suelo. Una hora más tarde regresamos al bus, no sé exactamente que pasó pero creo que todo se arregló con dinero. La policía se quedó con el whiskey, excepto 2 cajas, que se trajeron 2 mujeres que iban en el autobús. Antes de pararnos me extrañó que hubieran tanta gente trabajando en el autobús, no paraban de moverse por el pasillo. Arrancamos y el personal del bus estaba puteado pero sonriente y comentando la jugada, creo que perdieron la carga y tal vez algo de dinero.
Con Ecuador las relaciones también están tensas, un grupo armado se refugió en un campamento en la frontera entre ambos países, y Colombia bombardeó la zona, matando a los rebeldes, entre ellos dos ecuatorianos. Resulta que la zona estaba en territorio Ecuatoriano y su gobierno no fue informado, así que no les hizo mucha gracia y los acusaron de actos invasivos. Los colombianos de a pié dicen, si matamos a dos ecuatorianos, pero que hacían en un campamento rebelde? Nada bueno seguro.
Mi siguiente encuentro con otra etnia indígena, fue con los Koguis, en el camino a la Ciudad Perdida. La ruta duraba 3 días en llegar y tres en volver, pasando por bosques selváticos, cruzando ríos, campos, poblados indígenas,... Solo se podía ir con guías, y se pagaba una entrada. El ejército controlaba quienes entraban y quienes salían, no querían ni narcos, ni saqueadores de tumbas, ni guerrilleros ni paramilitares.
Hace unos años, en esas montañas, un grupo que se identificó como paramilitar (digamos que grupo armado de la derecha, violentos), secuestro un grupo de turistas en ciudad perdida, luego se supo que eran guerrilleros (digamos que grupos armados de izquierdas, la mayoría campesinos, que defendían sus tierras y familias). Los turistas eran alemanes, israelíes y de otras nacionalidades. Querían dar a conocer su causa al mundo, puesto que hacía años que estaban luchando y nadie se enteraba. Se dice que algunos de los secuestrados se unieron a la causa, y que incluso una chica alemana tuvo un romance con uno de ellos, salió en todas las TV, la chica se hizo famosa y escribió un libro. Desde entonces hay ejército en la zona.
Los indígenas kogui, no permiten que sus hijos estudien ni que vivan fuera de las montañas, ni casarse con alguien que no sea kogui. Tienen sus propias leyes, permiten bajar a otros pueblos y ciudades pero si se están más de 5 días, los bajan a buscar. Me pregunto que deben pensar los más jóvenes cuando ven pasar a grupos de turistas, cada día entran unos 5-15 turistas, no les entra la curiosidad de conocer otros lugares?
Llevan a los cerdos como si fueran perros, atados con una cuerda y se los lleva a todos sitios.
Los niños parece como si no tuvieran infancia, es algo que he notado en varios sitios, enseguida tienen responsabilidades y tareas. No lloran ni son revoltosos, están muy calladitos y formales.
Muchos pasaban por los campamentos donde dormíamos a descansar y comer algo que les pudieran dar los guías-cocineros, normalmente cocinaban más cantidad porque siempre aparecían unos cuantos hambrientos, o a tomar café o chocolate. Llevábamos 1 mula con la comida los 2 primeros días. Allí los podíamos observar más de cerca, poco habladores entre ellos, ya no digamos con nosotros!, respetuosos y observadores. Por lo general iban con los trajes bastante sucios, en otros lugares los indígenas iban más limpios.
La ciudad perdida es donde, aún hoy, se reúnen los mamas, gobernadores-alcaldes de una zona-poblado, y los gobernantes de las distintas áreas de la zona. Se reúnen en asamblea y toman decisiones. Algo parecido pasa en el pueblo de Nabusimake, en otra zona de Colombia, en los Nevados.
La Ciudad Perdida, la comparan con Machu Pichu, pero el paisaje no tiene nada que ver. En la Ciudad Perdida se dice que hay más de 500 terrazas, donde en cada una vivía una familia Kogui, pero estas no se ven en conjunto como podría imaginarse en Machu Pichu, las terrazas quedan escondidas entre la maleza y no se aprecia la extensión del conjunto. Se trataba de ir paseando por calles empedradas envueltas de vegetación y te ibas encontrando con las terrazas.
Tenían una cárcel, un agujero en el suelo, donde encerraban a los que se querían escapar de las montañas, o los incestuosos,… durante días sin comida ni bebida.
Tenían también un plano de la zona esculpido en piedra con los caminos y los ríos, donde el Mama (alcalde, gobernador,…) enviaba a sus mensajeros a llevar su palabra a las otras zonas indígenas.
Mi siguiente excursión fue ir a Nabusímake, cerca de Pueblo Bello, en Valledupar. Llegar hasta ahí, no fue fácil, estuve 2 horas para hacer unos 20 o 30 km por carretera de piedras, surcos, grietas y mucha inclinación, hasta llegar al poblado. Me dijeron que hacía una semana que no llegaba ningún turista por ahí. Para entrar en el pueblo tenía que pagar una entrada a la zona, e ir con un guía a hablar con los dirigentes indígenas Arhuacos del poblado en una cabaña, el pueblo me recordaba al de Ásterix y Obélix. Entro en la cabaña y me encuentro a unos 10 hombres (el mama, el secretario, el chamán, personas de confianza, consejeros,…¿?) sentados en pequeñas sillas y bancos de madera con sus trajes típicos. El guía me los presenta y me exponen la situación. Los últimos años, no se permite la entrada de visitas a las zonas indígenas sin control, después de todos los enfrentamientos y muertes, no quieren que aparezca gente extraña con malas intenciones por la zona, así que se interesan por mi, me preguntan a que me dedico y lo que hago en Colombia y especialmente en su pueblo. Les doro la píldora y me comentan que puedo hacer fotos al pueblo pero que procure no sacar fotos a los indígenas.
Nadie garantiza la seguridad a partir de ciertos puntos, y la decisión última de si alguien sube o no a las montañas y poblados son de los propios indígenas. Por ejemplo está prohibido subir a las cumbres de los Nevados (Monte Bolívar y Monte Colón de más de 5600 metros de altura). Actualmente están en negociaciones con el gobierno para regular el paso de turistas que aportan ingresos a la zona, es una larga negociación, quieren hacerlo bien y que la llegada de turismo tenga el mínimo impacto ambiental con el entono y con las etnias. Los indígenas son muy celosos de cuidar la naturaleza, de ella vienen, ella son a ella van.
Les entrego a los gobernantes del pueblo un paquete de arroz y otro de sal y les digo que lo repartan entre los más necesitados del poblado Arhuaco. Les comento también que tengo un poco más en casa de Sirena y Mila (Madre e Hija donde me hospedaba), me dicen que se van a pasar más tarde.
Por su reacción, parecía como que discutían sobre quien iba a pasar a buscar los alimentos, cosa que me hizo sospechar, pero ya lo había comentado. Así que cuando llegué le dije a Sirena que se lo entregaba a ella para que lo repartiese entre los más necesitados. Sirena y Mila cada mañana recibían a los niños más pequeños de la zona, algunos tardaban más de una hora andando desde sus casas en las montañas. Allí les daban el desayuno, luego hacían juegos, lecturas, cantaban, y después les daban de comer y se lavaban los dientes. Muchos de esos niños arhuacos eran el único alimento que ingerían en todo el día. Recibían dinero del gobierno por hacer esa tarea. Así que supuse que sería una buena idea confiar en ellas.
Al llegar 4 dirigentes a buscar el paquete de pasta, el de arroz y el de sal y decirles que se lo había dado a Sirena para que lo repartiera debido a que había visto que era un tema que generaba tensión, observé que les había disgustado mi decisión. Así que rectifiqué y delante de ellos le dije a Sirena que me iba a entregar de nuevo la comida, que no quería crear tensión ninguna, y que yo me encargaría personalmente de repartirlo. Al día siguiente le pedí a Sirena que me devolviera la comida y me comentó que se la había regalado una hora antes a una anciana. No me lo podía creer, le hice saber que eso no era en lo que habíamos quedado, que ella estaba delante cuando comenté lo que quería hacer. Y me dijo que no lo había entendido así. Al final no sé que creer, yo creo que me timó. Pero bueno al final se lo iban a comer los niños, supongo.
Compré pasta y arroz en la tienda de Sirena, y se lo regalé a varios ancianas que vivían en medio de la montaña, de camino a la catarata El Salto.
A los niños que se pasaban cada mañana por casa de Sirena y Mila me costaba mucho distinguir si eran niños o niñas, todos llevaban el pelo lacio, negro y muy largo. Mila me lo explicó, los niños llevaban mochila y las niñas collares, buf!!! Menos mal que había truco!!
A continuación os pongo una lista de películas colombianas recomendadas por gente que fui encontrando, muchas son basadas en hechos reales. Solo he visto algunas:
La pasión de Gabriel (no se ha estrenado pero tiene muy buena pinta)
Los viajes del tiempo
La sombra del comandante
Satanás
Rosario Tijeras (esta la tengo)
Buscando a Miguel
El arriero
Karma
La estrategia del caracol
La modelo
La sierra
La vendedora de rosas
La virgen de los sicarios
Los actores del conflicto
Lo mejor de Jaime Garzón (Humorista asesinado hace 10 años por hacer humor con políticos, a mi me parecía supergracioso y muy acertado en sus comentarios, cosas que dice que han pasado después de su muerte)
Se busca
Paraíso travel
Trafico Humano
Ventilador (serie)
Autopsia
Asesino Oculto
Anticristo
El intercambio
Perro come perro (trama mafiosa)
El silencio
El silencio de Lorna
La clase
La milagrosa
La profecía del no nacido
Turistas
Como veréis, la mayoría son pelis violentas, relacionadas con mafias, droga, corrupción o relacionadas con la religión.
Ostres nano ! No sabia que estaves a Colombia ! Sóc el Joan Montserrat !
ResponderEliminarI mirant el bloc del nando t'he trobat a tu. Espero que tot continui igual d'interessant per les Amèriques. Jo també tinc un bloc, el pots trobar en el del nando. Apa, bon viatge